América Latina (AL) – Unión Europea (UE) dos realidades tan próximas y tan lejanas. De parte de la Comisión Europea (CE) se evidencia la necesidad de reforzar la relación cultural que existe entre los dos territorios. Por un lado se reconoce el origen común entre las poblaciones de América Latina y Europa, así como existe una hermandad creada por lazos que involucran la historia misma y las oportunidades actuales de desarrollo de sus territorios. El proyecto ALFA – Miforcal surge como respuesta a esa necesidad de integrar las competencias docentes a la experiencia de trabajo en la formación a través de Internet con las metodologías actuales de gestión de la docencia escolar.
La metodología docente es reconocida como elemento generador de la cultura en la que son formados los estudiantes. Disponer de competencias docentes comunes entre AL y la UE se convierte en herramienta clave de generación de futuras culturas que incluirán una mayor cantidad de elementos comunes en la evolución profesional y ciudadana. La formación es un elemento clave que permite construir los elementos de base con los que el individuo evalúa lo que lo rodea para luego modelar sus propias herramientas profesionales.
En el marco del Sexto Programa Marco de la CE se aprobó el Master Interuniversitario para la Docencia de Calidad, que hoy ve sus primeros resultados en el grupo de 88 estudiantes activos que se encuentran en 6 países (Argentina, Brasil, España, Italia, Paraguay y Portugal) y que completarán un total de 200 cuando se integren los estudiantes que se piensa involucrar en el territorio italiano. Los estudiantes ingresan así a un sistema interuniversitario que les permite obtener el reconocimiento de la titulación en sus universidades locales y en la Universidad Ca' Foscari de Venecia. La homologación de los títulos fue el primer logro de importancia, si tenemos en cuenta que un estudiante en AL recibe el reconocimiento automático del título en todo el territorio de la UE.
La implementación del sistema consistió en otro resultado verificable del proyecto, si consideramos que se utilizó en un 100% la gestión a través de plataformas de tipo open source (MOODLE® versión 1.5), con servidores organizados en la estructura descentralizada de la red Univirtual[1] que depende de la universidad veneciana. La red de servidores fue pensada para una gran cantidad de usuarios y plataformas, por lo que se pensó ya en su origen, en la configuración de una red multiproyecto - multiplataforma que prevenga el riesgo de colapso de la estructura por el bloqueo funcional o de comunicación de alguno de sus nodos. Los servidores se encuentran distribuidos en diversos Server Farms, y la interacción de contenidos permite que desde el interior de cada campus se puedan enlazar servicios de streaming multimedia.
De esta forma las plataformas didácticas se mantienen livianas, aún incluyendo meses de gestión didáctica, actividades transversales entre distintos países y contenidos de interacción en imágenes, audio y video.
Pero el know how que generó esta red va más allá, porque se trata de la puesta en marcha de una lógica llamada Modelo Trébol (Traducción de Quadrifoglio en su acepción original)[2] que se presenta como un conjunto de cinco metodologías didácticas registradas como invención de parte del sistema Univirtual®. La propuesta de creación y configuración de las redes de interacción, se ha enriquecido así con la experiencia que la universidad de Venecia ha puesto en marcha desde el año 1997, cuando en Italia todavía no existían graduados universitarios a partir de Licenciaturas online.
Como toda nueva experiencia, el proyecto tuvo que superar diversos escollos para alcanzar el actual Tercer Reporte Técnico Anual de estado de avance de la iniciativa. En primer lugar, la barrera física de la distancia involucró acciones de promoción de una iniciativa que contaba en los papeles con el apoyo de distintos territorios pero que en la práctica involucraba poner de acuerdo los aparatos burocrático - administrativos de las distintas universidades. Así se generó el conjunto de Acuerdos Institucionales Marco que permite insertar los Protocolos de Actuación como el paso a paso que posibilita poner en marcha las actividades individuales del proyecto.
En segundo lugar, una vez que la colaboración ya fue validada desde el punto de vista institucional, quedaba por hacer la principal tarea que permitiría la puesta en marcha efectiva del proyecto. O sea: coordinar las actividades de estructuración de la oferta formativa y estimular las fases relacionadas con el lanzamiento didáctico en cada territorio (generación de la documentación, publicidad de los cursos, estructuración de los espacios de campus y gestión de los procesos de inscripción).
Las homologaciones universitarias representaron, como se podría esperar, el principal escollo a superar, porque en cada universidad la iniciativa debía ser aprobada por parte de sus equipos institucionales internos. En la fase de coordinación, en cambio, los aspectos más complejos fueron aquellos ligados a la interacción de contenidos para la publicación en los distintos territorios. En la práctica los contenidos docentes se distribuyen también en autorías entre distintos territorios, por lo que los estudiantes reciben no solo los servicios desde una red internacional, sino que los materiales didácticos mismos pertenecen a autores que han acordado colaborar con el proyecto en los distintos territorios participantes. Así, un conjunto de 15 autores se integraron a las actividades de colaboración con las acciones de 5 Coordinadores Locales y 20 tutores, en el estado actual de avance de la iniciativa.
Pero yendo hacia los aspectos más enriquecedores del proyecto, podemos verificar que la construcción de las metodologías hoy existentes permiten que la experiencia pueda tener continuidad en nuevas oportunidades de integración de las competencias en la formación. Como en la lógica de los distintos proyectos promovidos por la CE, es justamente en el ámbito de la continuidad en nuevos proyectos e iniciativas en dónde se podrá utilizar con mayor riqueza la contribución que ha hecho hasta el día de hoy la iniciativa ALFA - Miforcal.
Haciendo un pequeño repaso de estos resultados podemos distinguir:
El proceso de generación y configuración de los espacios para que resulten utilizables en modo universal; se trata de la secuencia operativa que permite poner en marcha las fases de configuración de los campus en modalidad e-learning más allá del territorio usuario. En el caso de ALFA - Miforcal se trató de un proceso a 6 fases de desarrollo: Definición - Personalización - Integración - Motivación - Coordinación - Interacción - Validación.
La metodología de integración de nuevos conceptos y contenidos resultantes a partir de la interacción internacional; para validar los contenidos y actualizaciones metodológicas del modelo se puso en marcha un mecanismo de propuesta y análisis de los materiales propuestos. Este proceso permite actualmente generar contenidos como propuesta oficial del sistema para luego hacer interactuar a los distintos participantes en cada territorio.[1] El modelo de trabajo se basó en la interacción de las prácticas en cuatro fases de desarrollo: Programación - Innovación Organizacional - Innovación Didáctica - Coordinación.
La validez intercontinental de los títulos universitarios otorgados por el sistema. Como resultado de los Acuerdos Institucionales entre las distintas universidades, los estudiantes (que a su vez son docentes en sus distintas realidades) reciben un título local de parte de la institución universitaria que coordina el proyecto en su nación. Este título local es validado en un 100% por parte de la Universidad Ca' Foscari de Venecia que le otorga, por ejemplo, validez europea a los títulos obtenidos en América Latina.
En el contexto general de aprobación de la iniciativa, el proyecto ALFA - Miforcal fue propuesto por la Universidad de Salamanca que desde España lo presentó como alternativa de interacción a Venecia. En el año 2001 la propuesta contó con el apoyo de la coordinación italiana para presentar la iniciativa de conjunto que ya involucraba la participación activa de los 6 países destinatarios a través de sus universidades participantes.
Los días 21 y 22 de mayo del 2007 la iniciativa participó en la Conferencia de "Buenas Prácticas y Resultados de Proyectos ALFA"[1] siendo nominada entre las Best Practices que permiten verificar en la realidad los resultados de las políticas europeas en el desarrollo integrado con AL. El encuentro permitió reflexionar sobre temáticas para el desarrollo de un futuro común en la cooperación en materia de Educación Superior entre la UE y AL.
La iniciativa ALFA - Miforcal, llegados al tercer año de gestión, permite hoy verificar resultados que aparecían solo como una propuesta teórica cuando en el año 2002 fuera aprobado por la CE. La dinámica de la enseñanza a través de Internet permite verificar resultados tangibles mucho más rápidamente de lo que se pueden imaginar los verdaderos cambios culturales provocados.
En una realidad como este proyecto, es difícil pensar en términos de clientes. Desde la documentación del proyecto podemos definir los clientes como los estudiantes que se encuentran en cada una de las naciones. Desde acciones llevadas a cabo podemos tener en cuenta que una nueva metodología acompaña al docente en el desarrollo de los instrumentos mismos que compartirá con sus estudiantes. Es por esto que en este caso podemos evidenciar que (más que de un cliente a nivel de usuario), el verdadero usuario terminan siendo las culturas de dos continentes.
Bienvenida, entonces, la interacción real que solo ayer parecía una oportunidad y hoy es parte de la historia ya construida a través del e-learning.